Algo mágico ha brotado durante cuatro días en mitad de un campo de naranjos. En una residencia hecha refugio, colindante con el Parque Natural de la Albufera (Valencia), dieciocho mujeres se han reunido para cruzar un portal hacia múltiples universos todavía por crear.
La conocida hasta ahora como Red de Mujeres Antiprohibicionistas (REMA) ha celebrado su primer encuentro presencial con los colectivos e individualidades que la componemos actualmente* para poner sobre la mesa las cartas de su presente y de su futuro.
El pasado, sin embargo, también merece la pena recordarse. El nacimiento de REMA, en 2016, se produjo a raíz de un encuentro de mujeres vinculadas al sector del cannabis: El Encuentro de Mujeres Cannábicas. Algunas de esas mujeres son las que han hecho posible que, entre periodos de mayor y menor actividad, la red haya ido acogiendo a nuevos colectivos centrados de una forma u otra en el ámbito de las drogas, más allá del mundo del cannabis –por ejemplo, Sot a Terra, cuyas integrantes se han presentado por primera vez en este encuentro.
Lo que hemos hecho durante estos días, encontrarnos y confabular juntas, también se nos ha prohibido en muchos momentos de la historia y en muchos lugares del planeta. Quienes lo han perseguido y penalizado siempre han sabido cuánto poder emerge de los vínculos y alianzas que creamos las mujeres y las personas de identidades disidentes. Afortunadamente, nosotras también lo sabemos.
Reimaginando una Red de Mujerxs Antiprohibicionistas
El deseo de construir juntas ha sido el motor principal de este encuentro. También el de generar estrategias de articulación y cuestionar nuestro posicionamiento ideológico para reelaborarlo, así como el de incidir política y socialmente en el ámbito de las drogas desde una perspectiva feminista.
El intercambio de ideas, saberes y experiencias ha podido nutrirse en este encuentro de una mirada intergeneracional (con mujeres de edades comprendidas entre los 27 y los 64 años). Venimos, además, de lugares distintos y de realidades diversas, pero las ganas de aunar memoria y nuevas sensibilidades han hecho posible el nacimiento de iniciativas que pretenden conformar una nueva REMA. Una de las conclusiones a las que llegamos es que, a partir de ahora, nuestro nombre incluirá explícitamente dos de los ejes vertebradores de esta red. Somos REMA – Feministas Antiprohicionistas.
Sabemos que la pócima perfecta no existe, pero también somos conscientes de la urgencia de un cambio de paradigma que garantice los derechos de las personas que usan sustancias a través de la despenalización y de la regulación basadas en criterios de justicia social. Para ello, resultará de vital importancia la visibilización y el fortalecimiento de narrativas históricamente silenciadas en el marco de un sistema cisheteropatriarcal, colonialista, capitalista, racista y capacitista. Narrativas que abogan, también, por el derecho a decidir sobre nuestros propios cuerpos y por la gestión de nuestros placeres.
Cuidados e intersecciones
Compartimos propuestas, risas, comida, preocupaciones, sueños y momentos de complicidad bajo la luz del sol y de la luna, conociéndonos y reconociéndonos. Hicimos que la palabra cuidados adquiriera olores, sabores, texturas y formas que algunas ni siquiera habíamos experimentado antes.
Por otro lado, decidimos repensar la intersección entre aquellos sistemas que oprimen a las personas que usan drogas. Sabemos que el prohibicionismo nace de la voluntad por criminalizar de forma específica a las personas no blancas, así que nuestro compromiso más urgente es el de revisar los privilegios y la homogeneidad de esta red y, sobre todo, el de llegar a aquellas personas que no están junto a nosotras.
Este encuentro, en definitiva, ha sido soplo y respiro. Un espacio-tiempo en el que escucharnos sin juicios para aprender, desde la admiración, la inspiración y la empatía.
No ha sido fácil llegar hasta aquí y no lo será enfrentar los retos que vendrán, sobre todo por el riesgo que implican para el orden establecido. Sin embargo, estamos dispuestas a ser trinchera, a seguir creciendo y a alzar la voz sin cumplir con los guiones establecidos, tal y como hicieron −a pesar de todo− aquellas que nos preceden.
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*¿Quiénes componemos REMA – Feministas Antiprohibicionistas?
Colectivos/organizaciones:
- Sot a Terra: Nació como proyecto colectivo y autogestionado y actualmente se constituye como asociación feminista cultural. Buscan visibilizar las experiencias de las mujeres dentro y fuera de la escena contracultural, así como transformar la realidad rave para liberarla del machismo y otras fobias. Se autodefinen como “Dj’s, productoras de música, consumidoras de drogas, bailongas, colectivos, artistas, tatuadoras, diseñadoras y cualquier mujer que sienta que forma parte de la escena de una manera u otra”. Recientemente han organizado el 1r Congreso ‘Una mirada transversal del ocio nocturno con perspectiva de género’ junto con el Servei d’Informació i Dinamització (SEDI) de la Universitat de València.
- Muyeres y Cannabis: Colectivo de mujeres que trabajan en asociaciones de la zona noroeste del Estado español (Castilla y León, Asturias, Cantabria…) y que organiza distintas jornadas de encuentro y eventos. Se autodefinen como feministas antiprohibicionistas y usuarias de cannabis y abogan por la regulación del cannabis con perspectiva de género.
- Mujeres Cannábicas: Colectivo de mujeres a nivel estatal, precursor de REMA, organizador del Encuentro de Mujeres Cannábicas de 2016 y que participa en distintos eventos. Se centra en la investigación académica con perspectiva de género y en la lucha contra la cosificación del cuerpo de la mujer en el ámbito cannábico.
- XADUD (Xarxa de Dones que Usen Drogues): La Red de Mujeres que Usan Drogas es un espacio de encuentro e intercambio construido colectivamente y abierto a todas aquellas mujeres y personas de género diverso que usan drogas. Nacida bajo la premisa “Nada sobre nosotras sin nosotras” en 2017 con el apoyo de CATNPUD, esta red tiene entre sus objetivos el de dar visibilidad a las realidades y necesidades de las mujerxs que usan dogas para reducir su aislamiento y las violencias que viven, así como para concienciar a la sociedad y a la comunidad.
- Metzineres: Primera cooperativa sin ánimo de lucro dirigida a desplegar Entornos de Cobijo –exclusivos para mujeres y personas de género diverso– que integran el espectro completo de reducción de daños. Desde su sede en el barrio del Raval (Barcelona), procuran espacios de seguridad, tranquilidad e intimidad a lxs participantes. Ofrecen propuestas holísticas e individualizadas acordes a las particularidades de cada unx, que favorecen su bienestar físico, emocional y mental. Un modelo de intervención innovador y atrevido basado en los derechos humanos y la transversalidad de género, sostenido por estrategias comunitarias y de la Economía Social y Solidaria que prueban ser fiables, pragmáticas y costo-efectivas, donde toda participante es protagonista.
Individualidades que forman parte de las siguientes organizaciones, dedicadas de una forma u otra al ámbito de las drogas:
- RdRcannabis: Programa de reducción de riesgos dirigido a clubs o asociaciones cannábicas. Acerca información y reflexión sobre el consumo de cannabis a través de diferentes recursos como folletos, carteles o formaciones a las personas que trabajan en ellas. Se caracteriza por trabajar de forma conjunta y transversal con las propias entidades y las personas que las conforman.
- ICEERS (International Center for Ethnobotanical Education, Research and Service): Organización sin fines de lucro dedicada a transformar la relación de la sociedad con las plantas psicoactivas, comprometida con algunos de los problemas fundamentales que resultan de la globalización de las prácticas relacionadas con la ayahuasca, la iboga y otros etnobotánicos. Proporcionan información elaborada desde la investigación y el conocimiento científico, promueven políticas públicas basadas en la evidencia y los derechos humanos y organizan eventos como la Conferencia Mundial de Ayahuasca y el Congreso Cannabmed, ambos referentes a nivel mundial.
- Pla d'accions sobre drogues de Reus y Dona Arsu Tot: Por un lado, el ‘Pla d’accions sobre Drogues de Reus’ fue creado en 2004 con la intención de integrar y formalizar las estrategias e intervenciones que se estaban realizando desde 1984 en Reus en materia de drogas, con el objetivo conciso de adecuarlas y dar respuestas pertinentes a una realidad cambiante, desde la complejidad y desde una interpretación holística del fenómeno. Por otro lado, ‘Dona Arsu Tot’ es la rama de ‘ARSU-Reus’ (asociación sin ánimo de lucro formada por personas que usan o han usado drogas y otras sensibilizadas con el fenómeno) que pretende ser un espacio de encuentro específico para mujerxs que quieran compartir experiencias, descargar la angustia, el sentimiento de culpabilidad, empoderarse y lograr seguridad para romper con los procesos de estigmatización social.
- Energy Control: Programa de intervención desde la reducción de riesgos en el ámbito de los consumos recreativos de drogas de la Asociación Bienestar y Desarrollo (ABD). Nacida en Barcelona en el año 1997 como proyecto pionero en el Estado español en el ámbito de la reducción de riesgos, tiene como misión ser una referencia rigurosa, honesta y libre de tabúes para que las personas que usan drogas puedan gestionar los placeres y los riesgos asociados a su consumo.
- CatFAC: Agrupación de asociaciones de personas consumidoras de cannabis que trabaja desde 2012 de forma colectiva para lograr el reconocimiento y la regulación de su actividad en Catalunya. A través de la regulación del cannabis, pretenden una mejora social que priorice el bienestar y la salud de las personas que lo consumen. Asimismo, pretenden empoderarse y defender el modelo que durante tantos años han ido construyendo para luchar contra el mercado ilícito, buscando la garantía de calidad, seguridad y acompañamiento en la gestión de placeres.
- ConFAC: La Confederación de Federaciones de Asociaciones Cannábicas (ConFAC) es una organización no gubernamental, sin ánimo de lucro, que interviene en el ámbito del cannabis abogando por la regulación justa y eficaz de la planta. Desde hace más de 20 años, defiende la iniciativa de los Clubes Sociales de Cannabis (CSC) como una alternativa de acceso al cannabis para millones de personas usuarias tanto en el Estado español como en muchas otras partes del mundo.
- OECC (Observatorio Europeo del Consumo y Cultivo de Cannabis): Laboratorio de ideas y acciones al servicio de la sociedad mediante la realización de propuestas eficaces para regular el cannabis. OECC se define como un espacio de carácter inclusivo, basado en la eviedencia y los derechos constitucionales, así como el método científico, la prevención de riesgos y la disminución del daño. La organización también defiende una regulación mundial que incluya la ayuda al desarrollo, así como la relación Norte y Sur y la perspectiva de género. Es, además, la primera asociación dedicada al estudio del cannabis en Europa que se inscribe en los registros de transparencia.
Texto e imágenes: Judit Vela