Las personas que usan drogas y que se encuentran en múltiples situaciones de vulnerabilidad, difícilmente entran o adhieren a los sistemas de atención sociosanitaria, quedan fuera del mercado laboral formal y no disponen de vivienda estable.
Sinhogarismo, experiencia migratoria y/o situación administrativa irregular, falta de ingresos económicos, LGTBIQ+, ejercicio del trabajo sexual, entre otros, provocan interconectadas formas de discriminación, prejuicio y estigma. Todo esto deriva en una vulneración sistemática de sus derechos.
Lejos de ofrecer alternativas óptimas adecuadas a las diversas realidades de las personas que garanticen su acceso a derechos, a menudo el Estado articula sus respuestas desde los mecanismos de control policiales y judiciales, criminalizando a los colectivos más vulnerabilizados y agravando desigualdades y injusticia social. Lo hacen a través de las sanciones administrativas por consumo o posesión en el espacio público, la criminalización del trabajo sexual o de otras formas de subsistencia que quedan fuera del mercado laboral reglado.
El endurecimiento de las penas en los delitos económicos leves y los delitos relacionados con drogas, entre otras, son algunas de las respuestas que impactan de forma desproporcionada y contribuyen a cronificar situaciones de exclusión.
Sin hogar estable ni teléfono, la falta por parte de la administración de canales de entrada y comunicación adecuados a sus circunstancias provoca que a menudo no se garantice el acceso a la información relativa a los procedimientos administrativos o judiciales que tienen abiertos, abocándolas a una gran indefensión.
Con el objetivo de facilitar la navegación por el sistema policial y judicial, esta guía quiere dar a conocer los derechos que nos amparan y dotar de algunas herramientas prácticas que faciliten encarar determinadas actuaciones policiales y judiciales.
Su contenido se ha elaborado en base a algunas de las inquietudes y dudas que las mujeres y personas de género diverso participantes de Metzineres han ido trasladando en el día a día.